Un tribunal alemán ha impuesto una multa de miles de euros a un sacerdote polaco y a su editor alemán tras su apelación a un veredicto anterior que los declaraba culpables de «incitación al odio» contra los homosexuales.

El padre Dariusz Oko fue juzgado en Colonia por iniciar una discusión académica sobre el lobby homosexual que opera dentro de la Iglesia. El profesor de la Universidad Pontificia Juan Pablo II en Cracovia describe su juicio como “un choque de la Iglesia de los mártires con la Iglesia de Sodoma y Gomorra”.

 “Al igual que en el ejército, en la policía, en el mundo del arte, por ejemplo, una vez que una persona con tendencias homosexuales llega a una posición de poder, por lo general los subordinados que nombra también son homosexuales … Lo mismo está sucediendo en la Iglesia”, puntualizó.

Wolfgang Rothe, un sacerdote abiertamente homosexual y plagado de escándalos de la arquidiócesis de Munich, denunció a Oko ante la corte de Alemania “por incitación al odio”. A pesar de que Oko probó su inocencia, el tribunal le ordenó pagar más de 3000 euros a la caridad. 

El cardenal alemán Gerhard Müller elogió recientemente a Oko por hablar en contra de la homoherejía: “Como alemán, me avergüenza que nuevamente sea posible en mi patria que un erudito polaco pueda ser condenado por la llamada incitación al odio”.

Después de los procedimientos judiciales, el p. Oko llamó al veredicto un “empate”, ya que sus oponentes esperaban que fuera encarcelado.