Un día había transcurrido del anuncio que hiciera el Obispo nicaragüense Mons. Rolando Álvarez cuando el régimen de Daniel Ortega ordenó cerrar el canal de televisión de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).

De conformidad con un comunicado de la empresa Claro, el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (Telcor), de propiedad del Gobierno, ordenó que “el canal 51, Canal Católico” sea “eliminado de la grilla de programación del servicio”.

Mons. Álvarez ha expresado que el régimen dictatorial pretende que haya una Iglesia muda, que no denuncie el pecado personal ni las injusticias, pero -ha añadido el prelado- si la Iglesia callara gritarían las piedras; esto durante una conferencia de prensa improvisada el sábado 21 de mayo desde la parroquia Santo Cristo de Esquipulas, en las afueras de Managua.

A su vez el Obispo Auxiliar de Managua, Mons. Silvio José Báez, escribió en Twitter que, “aunque la dictadura saque del aire al Canal Católico, todo será inútil”. “La Iglesia seguirá proclamando el Evangelio de la esperanza y de la justicia”.