En un artículo  publicado este mes, la arquidiócesis de Chicago satirizó a CatholicVote por retirar literatura pornográfica de los estantes de las librerías y bibliotecas como parte de  Hide the Pride, una campaña para ocultar material explícito de acoso sexual a los niños.

La directora de comunicaciones del cardenal Blase Cupich, Paula Waters, intentó desacreditar a CatholicVote por su movimiento.

“No todo lo que se llama a sí mismo ‘católico’ es de hecho parte de nuestra Iglesia. CatholicVote no es una organización católica; no es parte de la Iglesia ni está sancionada por la Iglesia ni tiene ninguna relación con la Iglesia. No tiene posición”. dijo Waters a un reportero local del Chicago Sun-Times.

La campaña Hide The Pride de CatholicVote alienta a los padres a sacar libros preocupantes de las bibliotecas para evitar que los niños estén expuestos a contenido dañino. Uno de esos libros es Gender Queer, una historia explícita que presenta imágenes y descripciones del sexo oral gay y la masturbación. 

El presidente de CatholicVote dijo: 

Tenemos una sólida relación de trabajo con muchos obispos y conferencias católicas de todo el país. Nuestra organización está formada por católicos bautizados, que trabajan en plena comunión con la Iglesia para ayudar a defender y promover la enseñanza social católica. Nos sorprendió ver nuestro nombre calumniado por un funcionario arquidiocesano a instancias de un periodista de izquierda que recientemente hizo olas por insinuar su apoyo a la legalización de la pornografía infantil.