En días pasados circuló un video en redes en el que se mostraba a una mujer semidesnuda irrumpir en la parroquia de St. Veronica en Eastpointe, estado de Michigan; la mujer ingresó gritando frases que manifestaban su apoyo al asesinato de bebés en el vientre.

“¿Revertir Roe? ¡Diablos, no!” y “¡Aborto sin disculpas!”, fueron algunos de los gritos de la mujer, que estaba acompañada por otra activista que sostenía el pañuelo verde que se ha convertido en el distintivo de los abortistas.

Los guardias de seguridad retiraron a las mujeres de la iglesia, mientras un hombre les recordaba al salir que “¡El aborto mata a los bebés!”.

La Arquidiócesis de Detroit dijo que durante las últimas cinco semanas ha estado alertando a los párrocos y parroquias para que estén al tanto de las transgresiones a la seguridad en otras diócesis.

“Nos entristece ver que los manifestantes interrumpen una celebración litúrgica y faltan al respeto a quienes estaban reunidos en oración”, dijo el portavoz de la Arquidiócesis, Ned McGrath.

El incidente es el último de una creciente lista de provocaciones de activistas a favor del aborto contra las iglesias católicas debido a la enseñanza de la Iglesia de que el aborto es un mal grave.