Según un informe de The New York Times,  los principales asesores de Biden tienen entre manos tomar algunas medidas que les permitan continuar perpetuando el asesinato de bebés, entre estas medidas esta la declaración de una emergencia de salud pública nacional así como invitar a los abortistas a tierras controladas por el gobierno federal, si se anula Roe v. Wade.

El informe explica que si Biden declarara una emergencia de salud pública nacional, su administración podría proteger a los médicos de la responsabilidad legal si realizaran abortos en estados donde no tienen licencia.

Con esto podrían conseguir que los mismos abortistas que ya operan en el país, puedan seguir haciéndolo aunque el aborto sea restringido o prohibido en docenas de estados.

Otra de las artimañas que está considerando la administración para proteger abortistas es invitarlos a trabajar en “enclaves federales”, como bases militares dentro de los estados que prohíben o limitan el aborto.

Con esto podrían seguir realizando los espantosos procedimientos en sus estados de origen, pero bajo la supervisión del gobierno federal en lugar del gobierno estatal.

Desde que se filtró el mes pasado el proyecto de decisión que muestra una posible anulación de Roe v. Wade , Biden ha dejado en claro que hará todo lo que pueda para que el aborto siga siendo lo más accesible posible en Estados Unidos.