El sacerdote jesuita prolgbt, P. James Martin, denunció por medio de sus redes sociales a un obispo de Dakota del Sur por publicar una serie de directrices pastorales que defienden la fe contra la agenda LGBT.

El obispo Donald DeGrood, de la diócesis de Sioux Falls, había emitido unas consideraciones prohibiendo a los estudiantes católicos defender, celebrar y expresar la «atracción por el mismo sexo» y la transexualidad; esto al jesuita Martin no le agrado por lo que comenzó a atacar al obispo diciendo que «la gente debería poder, y ser alentada a, “celebrar” quiénes son y, más importante, cómo los hizo Dios, incluyendo a las personas LGBTQ».

«Esto es una parte esencial de una espiritualidad saludable para cualquier persona. Esto es crucial para los jóvenes, y especialmente para los jóvenes LGBTQ, que se sienten, gracias a declaraciones como la anterior, ignorados, rechazados, condenados, marginados y completamente no bienvenidos en su propia iglesia».