Ha llegado la moda alemana de bendecir parejas homosexuales a Italia, en la diócesis que preside el Cardenal Matteo Maria Zuppi.

El pasado 11 de junio, Pietro Morotti y Giacomo Spagnoli se unieron civilmente, posteriormente acudieron a la iglesia de San Lorenzo, perteneciente a la diócesis de Bolonia, en el interior de la cual les esperaba un nutrido grupo de sacerdotes preparados para la Misa. El celebrante era el padre Gabriele Davalli (responsable de la pastoral familiar en la arquidiócesis de Bolonia) que los conoce y los acompaña en el grupo «En camino» para los llamados católicos LGBT.

La misa contaba con toda la pompa típica de las bodas: las flores, los trajes para grandes eventos, las canciones, el fotógrafo y los dos «recién casados» en primera fila.

Burlandose de la doctrina de la Iglesia, que prohíbe las bendiciones a las parejas homosexuales y lo hace con un responsum muy claro, los sacerdotes se inventaron una “misa de acción de gracias”.

Y para justificar sus desvarios el padre Davalli diría que “Cada misa es una acción de gracias” y que los jóvenes “recién casados” participaron como todas las personas que estaban en la iglesia; sin embargo esto es mentira pues en un momento dado, después de la comunión, los sodomitas subieron al altar donde el sacerdote les entregó un delantal, acto que el padre justificó diciendo que “La entrega de este delantal significó que estos dos chicos son jóvenes que siempre han servido al grupo En camino con el servicio de coordinación y recepción. No fue un gesto litúrgico”.