En una sesión de fotos indescriptiblemente blasfema para la revista Vanity Fair, Madonna interpretó a la Santísima Virgen María así como a “Jesús” en una versión de la “Última Cena” flanqueada por mujeres casi desnudas y una pose obscena.

En la primera edición europea de “Icono”, la “Reina del pop”, Madonna, de 64 años, se vistió como Nuestra Señora de los Dolores para la foto de portada de Vanity Fair, con velos tradicionales, un tocado dorado y adornada con la imagen de un “corazón” atravesado por siete espadas.

En otras fotos blasfemas que aparecen en la revista, Madonna se hizo pasar por Cristo en la “Última Cena”, envuelta en una estola roja y envuelta en cuentas de rosario, con las manos y los ojos levantados en una pose, como si estuviera rezando. Está rodeada de mujeres, algunas semidesnudas, que se hacen pasar por los 12 apóstoles de Cristo, como sugiere el dúo de fotógrafos Luigi & Iango.

En otra toma de “La Última Cena”, una de las modelos junto a Madonna posa provocativamente mientras está semidesnuda, mientras Madonna sostiene lo que parece ser pan, en una burla de la ofrenda de la Última Cena de Cristo, como se relata en las Escrituras.

En una foto extremadamente inquietante, Madonna lleva cabezas cortadas de muñecas y partes del cuerpo en la cabeza, el cuello, el corpiño y el área de la falda, mientras está flanqueada por dos modelos espeluznantes, enmascarados y de aspecto andrógino. Una cabeza de muñeca cortada y su cuerpo se sientan a los pies del busto de una estatua.